Estamos hablando del que demuestra consistentemente un comportamiento remarcable en cualquier línea de desarrollo.
Existen muchos casos de niños talentosos y dotados; la razón principal para discernir es que existen diferentes y variados grados de talentos.
Cuando nos hablan de un niño dotado, podríamos pensar, en que una habilidad superior interactúa con hechos, ideas, relaciones, creatividad y diferentes características que no se manejan en el IQ (Coeficiente Intelectual).
En otras palabras, son aptitudes especiales en áreas más específicas de talento, tales como: sociales, físicas, artísticas, musicales, lingüísticas y académicas.
Admitir que la inteligencia es superior, será sólo un factor determinante para el éxito de la selección e identificación; el conocimiento y el estudio de las características de estas habilidades es el ingrediente básico a seguir para poder calificar de dotado a un niño.
La característica más común para encontrar un factor determinante y considerar si un niño es dotado y talentoso generalmente es cuando llama nuestra atención su superioridad intelectual, creativa, artística, física, de liderazgo y visual – espacial.
Por otra parte, el término “Dotado” designa la posesión y el uso de una habilidad que no es entrenada ni enseñada y es expresada espontánea y naturalmente, a esto también se le llama, Aptitud o Don.
Estas habilidades naturales tienen una clara substracción genética y pueden ser observadas en cada tarea que el niño realiza y en donde éstas, son confrontadas en el curso de sus años escolares en por lo menos el dominio de una habilidad.
Las predisposiciones hereditarias para comportarse de ciertas formas, (Temperamento) así como los estilos adquiridos de comportamiento (Características de personalidad y actitudes) contribuyen también significativamente para soportar y estimular o al revés, disminuir y aun bloquear el desarrollo del talento.
El medio ambiente, manifiesta un significante impacto en muchas maneras diferentes.